The winter has arrived.
A ver: ¿quien se ha dejado la puerta del norte abierta?; Quien ha sido el atolondrado, imprudente, distraído y descuidado que ha pasado y ni siquiera la ha encajado ¿eh? Es que no lo habíais escuchado o estabais todos sordos. Si Los Starks llevan años advirtiéndolo, ¡Años! Que si el “Winter is coming” para arriba que si el “Winter is coming” para abajo y venga a darle al "Winter is coming" que no paraban. Te pedían un café y te lo decían, te pedían un tinto de verano con cuarenta grados y se te ponían místicos y te decían de forma circunspecta: "The Winter is coming" y nosotros con la guasa que nos caracteriza nada, haciendo oídos sordos. Seguimos aquí tan panchos al abrigo de nuestro solecito, nuestro calorcito, nuestra cervecita fresquita y sudando la gota gorda al amparo de ese agobiante calor que tanto maldecimos y que ahora echamos de menos. Tanto hemos alardeado de calor que ha llegado a los oídos de la guardia de la noche y estos